sábado, 26 de noviembre de 2011

La reconquista y el desierto del Duero

Uno de los grandes enigmas de discursión acerca de la reconquista, es como un grupo de guerreros, desde un minúsculo y nuevo reino en el norte peninsular, consiguió en pocos años dominar la totalidad de la mitad norte hispánica
Durante el reinado de Alfonso I, las huestes del reino de Asturias, en la Gallaecia cristiana. Reconquistan todas las tierras del Duero, y establecen una línea fronteriza libre de musulmanes. ¿cómo fue posible?, ¿quién era Alfonso I?.
Alfonso I, nació en el año 693 en Tritium Magallum (Tricio – La Rioja). Descendiente del rey godo Recaredo. Tricio era sede de su padre el duque Pedro de Cantabria, estando la Rioja en esos tiempos por tanto, bajo la jurisdicción del ducado visigodo de Cantabria. Del cual durante la alta edad media, nacería el reino de Castilla.
Alfonso I se hizo con el trono de Asturias, tras la muerte del rey Favila, hijo de Pelayo, quien encontró la muerte en Llueves, una pequeña aldea no lejos de Cangas de Onis durante una cacería. Esa es al fuerte oficial, aunque no pocos opinan que el rey asturiano murió en un intento de realizar un acto heroico que le igualara con su padre (Pelayo). O incluso quien cree ver en la muerte de Favila, un ritual germánico pagano en el cual se vio envuelto. Sea como fuere, lo cierto es que tras la muerte de Favila, Alfonso I hereda el reino de Asturias, siendo ese en esos momentos, la casi totalidad de las tierras existentes en la cornisa cantábrica.
Alfonso I y su leal espada, su hermano Fruela Perez, comienzan una aventura en pro de reconquistar las tierras al sur del reino en manos de los musulmanes. Ellos son los que reconquistan Galicia, bajo el poder de las tropas omeyas, incorporándola al reino de Asturias. Precisamente fue Fruela Perez quien liberó la ciudad gallega de Lugo, y las portuguesas de Tuy, Oporto, Braga. Pero la expansión de Alfonso I y las tropas de Fruela no se detuvieron ahí. Continuaron una expansión belicosa hacia el sur, llegando hasta Avila y Segovia.
Alfonso I se encontró entonces con un problema logístico. Había reconquistado un gran terreno, pero no disponía de soldados ni medios para controlarlo, y mucho menos para repoblarlo. Fue por ello que la política de Alfonso I se basó en los ataques de saqueo y desgaste. Atacaba las principales ciudades y pueblos bajo el poder de los bereberes, aniquilaba a todos los musulmanes, y liberaba a la población cristiana. Dando la oportunidad de unirse a ellos viajando hacia el norte. Así pues, grandes números de hispano godos procedentes de las tierras de Leon, y los campos góticos, libres ahora del poder moro, se aliaron como parte de la repoblación del norte. Sin ir mas lejos fue Fruela Perez el encargado de repoblar con gentes godas llegadas de las tierras de campos, la provincia de Galicia.
Al mismo tiempo en el sur de Hispania, comenzaba una “guerra civil” entre los musulmanes. Por un lado la clase aristocrática árabe, contra los bereberes y los sirios. Esto fomenta que los guerreros bereberes asentados en las zonas del Duero y Galicia, bajen en ayuda de sus intereses en Córdoba. Realmente en toda la meseta norte, no existió un dominio real musulmán. Únicamente fuertes militares para el control de la zona, principalmente de etnia bereber. Quienes tras sufrir una política de desgaste por parte de Alfonso I, a lo que se hubo de unir la guerra civil en Córdoba. Provoco que una inmensa mayoría de estos guerreros abandonaran la zona descendiendo hacia el sur, involucrándose en la guerra civil por el poder en Andalucía.
Fue un momento propicio, ya que ahora si el desierto del Duero se hizo real.... un gran terreno deshabitado tanto por cristianos como por musulmanes, se extendía al sur del reino de Leon, y por gran parte de los campos góticos Un momento mas que propicio para que la marca cristiana se extendiera territorialmente

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